Tras la derrota frente a Zunder Palencia en las semifinales de la Final Four por el ascenso a la Liga Endesa, el Real Valladolid Baloncesto afronta la campaña 2023/2024 con gran ilusión y con la meta de repetir, o incluso mejorar, los resultados de la pasada temporada. En palabras de su entrenador, Paco García, el objetivo es competir.
“El primer paso nuestro es el de no quedarnos atrás. Ahora mismo somos el cuarto equipo de la liga, ganado a pulso sobre la pista, muy por encima de lo que decía el presupuesto, que ahora sube, pero lo hace en consonancia a la liga y otros equipos. La intención es la de competir, competir y competir. Mejorar las cifras del año pasado solo tiene un nombre. Vamos a ver hasta dónde llegamos. Ahora mismo lo único que les he pedido a los jugadores es competir en cada entrenamiento, ejercicio y partido que juguemos. Competir es la palabra”, comentaba el técnico vallisoletano.
El conjunto pucelano afrontará el nuevo curso con doce jugadores en nómina tras un verano con mucho movimiento en las oficinas del Pisuerga. En el apartado de bajas, el UEMC Real Valladolid ha perdido a seis jugadores que se encontraban en su plantilla el año pasado. La salida más sensible que se ha producido en el mercado estival ha sido la del base Melwin Pantzar, que ha puesto rumbo hacia el Blibao Basket. El internacional sueco fue el “jugador franquicia” del equipo blanquivioleta, promediando 15,1 puntos y 3,9 asistencias en 34 partidos. En la demarcación de escolta, Greg Gantt también ha abandonado la disciplina vallisoletana para enfundarse la camiseta del Cáceres Ciudad de Baloncesto.
Donde más movimiento se ha producido este verano en el club ha sido en las posiciones de pívot y ala-pívot, con dos marchas por puesto. Alex Mazaira y Jordy Kuiper han sido los “4” que se han desvinculado del RV Baloncesto en este mercado. Mientras que Mazaira ha fichado por el Zornotza Saskibaloi Taldea de LEB Plata, Kuiper firmó con el Donar Groningen de la BNXT League, a pesar de ser uno de los ídolos de la afición en Valladolid.
En cuanto a los pívots, las partidas han sido las de Kevin Allen, nuevo fichaje del del Club Atlético Goes uruguayo, y Herve Kabasele, que aún sigue sin equipo y recuperándose de su lesión de ligamento cruzado. Por último, el club castellano cedió al alero Pablo Martín al CB Starlabs Morón de LEB Plata, tras disputar dos partidos con el primer equipo la temporada pasada.
FICHAJES
En cuanto a las nuevas incorporaciones, el club ha firmado a cinco nuevos jugadores que intentaran dar un salto de calidad al proyecto de cara a este nuevo año. El primer fichaje fue el del ala-pívot zaragozano Jaime Fernández, procedente del CB Almansa y con experiencia en las categorías inferiores de la selección española. Como principales virtudes, se puede hablar de su capacidad reboteadora, gracias a sus 2,06 de altura, promediando 5,1 rebotes en la 2022/23. También destaca por su tiro exterior y su juego de pies.
Para tratar de paliar la dura baja de Pantzar, los blanquivioletas han cerrado al base catalán Sergi Costa, que también llega del CB Almansa siendo su jugador más importante el curso pasado. Su buen físico y envergadura lo convierten en un eficaz defensor. Aun así, lo mejor de su juego es su capacidad para dirigir el juego, con 4,6 asistencias de promedio la pasada campaña. Además, es capaz de anotar, tanto penetrando hacia el aro como lanzando triples, convirtiéndose en un jugador “3 and D”.
En la posición de “2”, el UEMC Real Valladolid ha conseguido cerrar al que se supone que será el encargado de anotar los puntos en Pisuerga, Devin Schmidt. El escolta estadounidense es todo un veterano en la categoría, siendo reconocido por su talento para encestar, ya sea a larga o media distancia o entrando en la pintura. Schmidt promedió más de 11 puntos el año anterior y llega a Valladolid para tratar de repetir el ascenso logrado con Zunder Palencia, del que fue pieza clave.
Junto a Jaime Fernández en el puesto de ala-pívot, ha llegado desde el Juaristi ISB el vitoriano Iñigo Royo. El jugador de 23 años aportara contundencia cerca del aro e intensidad en defensa, siendo también capaz de ser una amenaza exterior con su 33% desde la línea de tres.
Para cerrar el apartado de las altas, los pucelanos han incorporado al pívot Lotanna Nwogbo, que llega tras firmar muy buenos números en Leyma Coruña en LEB Oro, anotando 10 puntos y capturando 4,7 rebotes en 33 partidos. El interior de 2,04 ofrecerá intimidación y anotación en la pintura, que, combinado con su movilidad y su facilidad para el rebote, lo convierte en un seguro para la categoría. Por si fuera poco, el “5” ha sido internacional con la selección de Nigeria en tres ocasiones. Así mismo, se ha decidido apostar por el joven canterano Juan García-Abril para pelar por minutos como ala-pívot tras tres temporadas compaginando presencias en la categoría de plata con el filial castellano.
Pese al gran volumen de salidas y entradas en la entidad vallisoletana, también se ha conseguido renovar a cinco jugadores para apuntalar la plantilla de cara al nuevo curso. El capitán, Sergio de la Fuente firmó en 2022 un nuevo contrato que ampliaba su compromiso hasta el año 2024. El ala-pívot vitoriano ha disputado más de 200 encuentros con la blanquivioleta. Toda una leyenda, que ofrecerá liderazgo para lograr el objetivo. Como exteriores, Mike Torres y Jaan Puidet han renovado su comprimiso con el Real Valladolid Baloncesto. Ambos tienen una gran experiencia en LEB Oro, siendo el segundo y tercero, respectivamente, con más partidos en el club, habiendo disputado más de 90 cada uno. Los dos son capaces de dar intensidad en tareas defensivas, aunque sin descuidar el ataque, anotando en penetración y desde el perímetro.
Para disputarse los minutos en la posición de alero, tanto el esloveno Maj Kovacevic como el congoleño Romaric Belemene continuarán, al menos, una temporada más en Valladolid. Este último fue fundamental en la rotación de Paco García, aportando mucho en defensa gracias a su imponente físico. Por otro lado, Kovacevic es uno de los referentes en el apartado ofensivo, promediando un 40% en triples. Además, fue fundamental para conseguir eliminar a ICG Força Lleida en los playoffs previos a la Final Four, siendo un puñal desde los 6,75 metros.
Finalmente, el equipo se completa con el pívot Lucas N’Guessan, que llegó a mitad de temporada la campaña pasada desde el Levitec Huesca de LEB Plata. En esta media temporada se hizo notar gracias a su buen juego de pies y, sobre todo, su habilidad para taponar, que le llevó a promediar 1,1 tapones en Huesca.
Los de Paco García comenzarán la temporada el viernes 6 de octubre visitando Grupo Ureta Tizona Burgos. Será en ese momento en el que los vallisoletanos deberán mostrar cuáles son sus aspiraciones reales para la temporada y si de verdad son capaces de pelar por el ascenso a la categoría de oro, la Liga ACB.