El VRAC Quesos Entrepinares no falló en su estreno en el play-off por el título, festival ofensivo de los de Diego Merino, que dominaron el encuentro con contundencia desde los primeros minutos En un Pepe Rojo vestido para la ocasión, el conjunto vallisoletano se impuso con solvencia (57-17) a un Barça Rugbi que sorprendió de inicio, pero que no pudo aguantar el ritmo y la intensidad del equipo de Diego Merino.
Los locales desplegaron su arsenal ofensivo con siete ensayos, liderados por un brillante Balta Taibo al pie y un Fran del Pino muy incisivo. El vigente campeón ya espera rival para las semifinales de la División de Honor.
Los primeros compases del partido fueron un espejismo. El Barça Rugbi, que llegaba tras vencer al Complutense Cisneros en la última jornada de la fase regular y colarse en el play-off en el último suspiro, saltó a Pepe Rojo sin complejos y golpeó primero.
Encadenando buenas fases y con paciencia en campo contrario, logró encontrar un hueco en la defensa quesera para que Robledo posara el primer ensayo por el ala.
Pero la respuesta del VRAC fue inmediata y contundente. Sin precipitarse, haciendo gala de su habitual templanza, los de Merino reaccionaron con una acción que nació en campo propio: ruptura en el centro, pase al límite de Pablo Mateos y carrera de Mauro Perotti hasta posar bajo palos. Taibo adelanto con el pie (7-5) y la maquinaria azulona empezó a carburar.
Las fases estáticas comenzaron a decantarse del lado local, y de una melé ganada cerca de los 22 metros surgió una touche que el VRAC aprovechó para que Marc Sánchez posara el segundo ensayo. Otra transformación impecable de Taibo (14-5) confirmaba el dominio creciente.
La tercera marca llegó tras una gran combinación en la línea de tres cuartos. Taibo leyó a la perfección, fijó al defensor y soltó en el momento justo para que Pablo Mateos, autor de la asistencia en el primer ensayo, firmara el suyo por el costado derecho. Con el 21-5, el VRAC imponía ya un ritmo difícil de igualar.
Los cambios en la línea aportaron frescura, y Fran del Pino aprovechó su primera oportunidad para colarse con decisión y ampliar la ventaja con un nuevo ensayo. Taibo seguía intratable al pie: 28-5.
Un espectacular 50:22 de Sam Hollisworth dio origen a una jugada coral: touche, balón rápido a la línea, pase eléctrico de Pedro de la Lastra y nuevo ensayo de Del Pino, que firmaba su doblete. Con la transformación, 35-5 y auténtico festival ofensivo.
Antes del descanso, el Barça logró maquillar el resultado. En una acción bien llevada por el ala, Romano encontró la esquina para cerrar la primera mitad con un ensayo que dejó el marcador en 35-10.
El VRAC volvió del descanso sabiendo que el trabajo no estaba terminado. Tras una primera mitad intensa, tocaba resistir cualquier intento de reacción blaugrana. Y así lo hizo desde el inicio. Una buena presión defensiva frenó a Ojeda, y tras la recuperación, Perotti habilitó a Surumi para que posara el sexto ensayo local (40-10).
Aun así, el Barça no bajó los brazos. Una acción por el ala, finalizada con una precisa patada al espacio, permitió a Felipe Alegría entrar sin oposición. Marsilla acertó con la transformación: 40-17.
Con pausa y control, el VRAC optó por asegurar la ventaja. Una indisciplina catalana permitió a Taibo sumar tres puntos más con el pie (43-17) y calmar cualquier atisbo de reacción.
El ritmo decreció, pero los locales siguieron imponiendo su juego. Martiniano Cian aprovechó una apertura por la derecha para lanzar una carrera por el vértice de los 22 que rompió definitivamente al Barça. Con su ensayo y otra transformación de Taibo, el marcador subía al 50-17.
Con el tiempo cumplido, y ante una defensa ya desfondada, Cian volvía a aparecer para posar su segundo ensayo y sentenciar el partido con un rotundo 57-17. El VRAC, sólido en ataque y firme en defensa, confirma su candidatura al título y ya espera rival para las semifinales.