Vuelta a la competición. El Real Valladolid regresa a los terrenos de juego dos semanas después de sufrir el abultado resultado en Montjuic de 7-0 frente al FC Barcelona. Este domingo tendrán enfrente al RC Celta en Balaídos, con el arbitraje de Hernández Maeso.
El Real Valladolid no sabe lo que es ganar en Balaídos en el siglo XXI en Primera División. Llevan desde 1997 sin conseguir los tres puntos, cuando lo hicieron en la temporada 96/97, con un 0-2. Desde entonces, siete empates y seis derrotas, la última por 3-0 el último curso en la máxima categoría (22/23).
Pezzolano ha hablado este sábado en rueda de prensa: «Tenemos que saber que ellos tienen sus debilidades y nosotros nuestras fortalezas, hay que jugar como equipo, ser competitivos al cien por cien y saber llevar los momentos del partido».
Las dudas en el once estarán en la defensa. Con Javi Sánchez lesionado, a Pezzolano le tocará apechugar con los dos descartes del Valencia cedidos al Real Valladolid, Cömert y Cenk, cuyo rendimiento está aún muy en duda. La otra posibilidad es poner a David Torres. El canterano es el cuarto central en estos momentos y tendrá que estar preparado si es necesario que entre.
Hernández Maeso dirigirá el encuentro de este domingo en Balaídos. El Real Valladolid todavía no ha perdido con el hispano-belga. Tres partidos, dos victorias y un empate en Segunda División, por lo que será la primera vez que coincidan en la máxima categoría. Hernández Maeso estará asistido en las bandas de Balaídos por Massó Granado y García González, y en la Sala VOR por Figueroa Vázquez.