La derrota por 76-57 el pasado martes ante Hestia Menorca se ha sumado a la lista de sonrojantes partidos fuera de casa de las ardillas esta temporada, junto a los duelos en Oviedo, Burgos y Ourense. Precisamente los gallegos visitan este sábado a las 17:00 el feudo del Real Valladolid Baloncesto. Antes de recibirles, Paco García, visiblemente decepcionado por la actuación de su equipo en las Islas Baleares, contestó las preguntas de la prensa para dar explicaciones sobre la pasada jornada y analizar al siguiente rival del UEMC.
Antes de abrir el turno de preguntas, el preparados castellano ha comentado como se gestó la caída de los blanquivioletas en Menorca: «El partido fue una cornada de doble trayectoria, fue horroroso, con un 33% de tiros de dos y 21 balones perdidos. Estoy dolido conmigo mismo porque nuestro equipo, cuando toda va viento a favor, todo va genial, pero cuando algo se tuerce, en vez de dar un paso para adelante, damos dos para atrás. Como entrenador, me duele no saber transmitir esa ambición o de no ser capaz de encontrar paliar la baja de Devin o la de Mike Torres anteriormente. Acepto la derrota, la entiendo como parte del juego, pero en mi cabeza no entra no competir como el otro día. Les he dicho a los jugadores que si hubiéramos ganado los cuatro partidos ante rivales que están más abajo que nosotros, hoy estaríamos líderes y eso se llama ambición. Fuimos una marioneta de un Menorca que en cuanto olió la sangre, dejó el partido sentenciado».
Al ser preguntado por si en el equipo existe cierto acomodo, Paco García ha respondido que «siente cierto acomodo del equipo, el viaje no fue difícil, entrenamos el lunes y el martes por la mañana, pero al llegar al partido, como no está Devin pues no competimos y no puede permitirse».
Una de las preguntas obligadas era sobre el estado de Devin Schmidt, baja muy sensible para las aspiraciones vallisoletanas. El entrenador ha confirmado su mejoría, diciendo lo siguiente. «Esperamos que Devin llegue a mañana, ha terminado el entrenamiento y él quiere jugar. Él forzó para jugar el martes pero se tuvo que retirar del calentamiento porque no podía».
Finalmente, ha cerrado su comparecencia resumiendo el juego del CB Ourense; » Ourense salió enchufadísimo en la ida, no sabíamos por donde nos venían, entre Turner y Kacinas, nos metieron 52 puntos. Tienen dos grandes bases, dos interiores muy solventes, calidad en el perímetro. Como mañana no salgamos enfocados, vamos a pegar otro petardazo y eso es lo que le intento trasmitir a los jugadores. Esperemos que mañana contra Ourense, que promedia 72 puntos y en el primer cuarto de la ida nos metieron 35, seamos un equipo solvente».