Después de las dos derrotas en los duelos frente a Melilla y Oviedo, el Real Valladolid ha cortado de raíz la mala dinámica superando ampliamente a un Fuenlabrada que fue de menos a mas, aunque le faltó igualar los porcentajes locales. Devin Schmidt recuperó su mejor versión y se alzó con el premio de máximo anotador, con 22 puntos. Costa fue el mejor asistente con 4 pases de canasta y Jaime Fernandéz y Nwogbo lideraron el apartado de rebotes con nueve capturas cada uno.
Con un Pisuerga repleto de niños por el dia de Reyes, el choque arrancó con la sorprendente entrada en el quinteto inicial del lituano Zigmantavicius, en detrimento de Sergi Costa. Los primeros compases tuvieron un alto ritmo anotador por parte de ambos bandos, aunque los locales, de la mano de De la Fuente y Schmidt, se pusieron rápidamente por delante. Tal fue el torrente ofensivo de los pucelanos que Toni Ten tuvo que pedir tiempo muerto pasados cinco minutos, con un tanteo de 15 a 7. La intensidad, talón de Aquiles en las últimas jornadas, fue innegociable desde el principio, haciendo que los castellanos completaran, con un marcador de 21 a 18, un primer cuarto muy serio. La renta pudo ser más alta de no ser por los buenos minutos de Garino, que anotó 5 puntos en 6 minutos.
Tres triples del Real Valladolid abrieron a lo grande el ataque en el segundo cuarto, obligando a Fuenlabrada a gastar su segundo tiempo muerto, con un resultado de 30 a 21, tras poco mas de dos minutos. A pesar del buen hacer anotador, los pucelanos realizaron alguna mala lectura defensiva y se cargaron pronto con tres faltas, lo que mantuvo en partido a los madrileños. Pero la vuelta a pista de Devin Schmidt reeactivó el arsenal violeta, que se situó cinco tantos arriba. En el lado visitante, la línea de 6,75 fue su principal aliada, con 4 cestas en 7 intentos. Las pérdidas se siguieron sucediendo en el conjunto azulón, alcanzando las 11 tras 20 minutos. Esto permitió al UEMC colocar una nueva máxima de 11 puntos. En los últimos dos minutos, Nwogbo acudió a la línea de personal en seis ocasiones, anotando en cinco de ellas, cerrando así un tanteo de 46 a 37. Devin Schmidt, con 14 puntos, se fue al vestuario como máximo anotador.
Arranque fuerte del Pucela en la segunda mitad, con un parcial de 6 a 0, disparándose 15 arriba en el primer minuto de juego. A esta buena racha encestando, se sumó que Fuenlabrada alcanzó las 4 faltas antes de cumplirse los dos minutos de tercer cuarto. Un triple de Schmidt agotó la paciencia del técnico de los fuenlabreños, que entraron en el tiempo muerto con 18 puntos de desventaja y salieron de él concediendo el bonus. En cuanto a las faltas, los de Paco también las usaron pronto y se quedaron sin ellas segundos después. Esto hizo que el partido se tornara en una visita constante a la personal, con 23 lanzamientos totales en el cuarto. Tras una bandeja del «0» local, los blanquivioletas traspasaron la barrera de los 20 puntos de diferencia, marcando un resultado de 61 a 40 a falta de 5:17 del tercer periodo. Fue en ese momento cuando los del Fernando Martín se marcaron un parcial de 11 a 2, acortando la distancia a 12 y forzando a Paco García a frenar el crono. La pausa ayudó a recomponerse pero no pudo evitar un triple final de Aranitovic, que situó un electrónico de 69 a 56.
Los últimos 10 minutos empezaron con una distancia firme para los blanquivioletas, que repitieron el error de cargarse de faltas en muy poco tiempo. A esto se añadió un parcial de inicio de 6 a 0 en favor madrileño, que se metió de lleno en el choque. Sin embargo, cuando la bola más quemaba, sendos triples de Jaime Fernandéz y Sergi Costa volvieron a abrir la brecha en su favor. Pese a esto, Fuenlabrada se agarró al partido, merodeando diez puntos atrás. Tres faltas consecutivas, dos de ellas antideportivas, a Jaime Fernandéz permitieron a los de Pisuerga una ventaja de quince puntos cuando quedaban poco más de tres minutos. En lo que restó de encuentro, los vallisoletanos se lucieron ante un «Fuenla» que tiró la toalla finalmente. El resultado al término del partido fue de 87 a 72, consumándose así la victoria número 11 en la temporada del Real Valladolid.
El siguiente compromiso para las ardillas será la vista al Palacio de los Deportes Paco Paz el viernes 12 a las 21:00 horas, cuando se enfrentarán al Club Ourense Baloncesto.