El Real Valladolid Baloncesto alcanzó el pasado viernes ante el Cáceres Ciudad de Baloncesto la octava victoria de manera consecutiva, lo que supone un nuevo récord en la historia del club vallisoletano. Ni el difícil calendario ni las lesiones han sido capaces de frenar al cuadro dirigido por un Paco García que va camino de lograr su segundo premio, y es que el técnico vallisoletano ha logrado que el equipo sea muy coral y logre salir victorioso en múltiples contextos.
A cuatro jornadas para el final de la primera vuelta, los pucelanos tendrán que superar en Pisuerga a un equipo duro de batir a domicilio: Melilla Ciudad del Deporte, que ya estuvo a un punto de batir a Estudiantes la pasada jornada.
A pesar de haber sido uno de los tres equipos descendidos durante la 22/23, el Melilla Baloncesto asumió la plaza que no pudo permitirse el Almansa, continuando así como el decano de la categoría de plata del baloncesto español, con 27 años de experiencia en LEB Oro. Este año, las caras han cambiado bastante en el Javier Imbroda, ya no solo desde la pasada campaña , sino también desde la pretemporada, donde ya se midieron al Real Valladolid con una plantilla muy diferente.
A estas alturas del año, los melillenses se encuentran con un récord de 5 a 8 y sus principales referentes son nuevas incorporaciones. En sus filas se encuentra, nada más ni nada menos que el máximo asistente de la categoría, el base Óscar Alvarado. El canario está dirigiendo a lo grande, firmando unas 7,4 asistencias por choque a las que también suma ocho puntos.
Aun así, la responsabilidad en este aspecto reside en gran parte en el escolta estadounidense Parker Van Dyke, que promedia 14,5 puntos, con el triple como arma fundamental, y ha alcanzado números mucho más altos, como los 36 puntos que sumó ante Tizona. Además, tienen en plantilla a buenos veteranos con experiencia en LEB Oro, como los pívots Mario Delas y Marc-Edy Norelia, ambos con buena presencia en la zona. Sin embargo, el Melilla tiene su principal defecto en la anotación, siendo el cuarto peor equipo en este registro, con 73,6 puntos por partido.
Por el lado local, Paco García ya ha querido dejar claro que, a pesar de la distancia en la tabla clasificatoria, para lograr una nueva victoria tendrán que mostrar su mejor versión tanto en defensa como en ataque. Las ardillas lo tendrán mas sencillo si Devin Schmidt ayuda a paliar la baja de Torres en el aspecto ofensivo, prolongando así su gran estado de forma, el cual lo llevó a anotar 36 puntos la pasada jornada, colándose en el quinteto ideal. Aun así, la capacidad de liderar en este equipo ha ido rotando constantemente con el paso de los partidos, otro aspecto clave para entender las ocho victorias encadenadas .El Valladolid solo perderá por lesión esta jornada a Iñigo Royo y a Mike Torres.
El duelo tendrá lugar este miércoles a las 20:45 en el Polideportivo Pisuerga y se podrá seguir a través de LaLiga +.