Cuando parecía que el proyecto del renombrado como CBC Valladolid comenzaba a dar sus primeros pasos para retornar lo antes posible a la Primera FEB, la polémica vuelve a rodear a la entidad vallisoletana. Y es que, este fin de semana, entre la noche de este sábado y la mañana del domingo, dos ya exjugadores del UEMC Real Valladolid, Shemar Wilson y Amanze Egekeze, han publicado sendos comunicados acusando al club de «tóxico» y «poco profesional», centrándose además en la figura de Pepe Catalina, director deportivo del equipo durante 8 temporadas y que se despidió de su cargo el pasado viernes.
El primero en alzar la voz fue el ala-pívot estadounidense con pasaporte nigeriano, Egekeze, quién, a través de su cuenta de X (citando el post de la despedida de Pepe Catalina), hizo saltar la bomba, afirmando que había estado 7 meses sin comentar nada al respecto porque «era un profesional» pero que al ver que el club seguía mintiendo sobre él se veía obligado a responder.
Amanze afirmó que, a pesar de lo dicho por el club, él no llegó al equipo lesionado, sino que su lesión sucedió ya en Pisuerga. Las primeras acusaciones graves vienen a continuación, cuando el jugador asegura que Pepe Catalina le obligó a jugar cuando aún estaba convaleciente de su rodilla, presionando a los médicos y entrenadores para que le sacaran al parqué a pesar de su situación, sintiéndose «humillado».
No obstante, lo más grave fue cuando reveló en el comunicado que Catalina agredió físicamente a uno de los jugadores, cuyo nombre no ha trascendido, tras la derrota en el derbi contra Burgos. Las reacciones eran habituales en el director deportivo vallisoletano, según el estadounidense.
El jugador terminó diciendo en el comunicado que «Valladolid fue, sin duda, una de las situaciones más tóxicas y poco profesionales en las que he estado. Nunca me han faltado al respeto ni me han tratado peor en ningún club en mis siete años de carrera», aunque también agradeció a los aficionados, a sus compañeros y entrenadores que le apoyaron en todo momento.
Shemar Wilson también habla
Aquí no acaba la polémica. Este domingo nos levantábamos con el segundo comunicado. Esta vez, Shemar Wilson recogía el testigo de su compañero y echaba más leña al fuego revelando más acciones acometidas por la directiva blanquivioleta, encabezada por Catalina. El pívot asegura en el texto que este último estaba lejos de ser un «buen tipo» y que «cruzó la línea» muchas veces este año, aprovechándose de su situación de poder.
El de Arizona prosiguió hablando sobre las promesas incumplidas por los pucelanos, quienes, según él, aparte de asignarle un apartamento «mohoso», no le pagaron al llegar al equipo y no recibió el coche oficial hasta tres meses después de su fichaje. Tras eso, volvió a la carga contra Pepe Catalina, asegurando que «no sabe separar su vida privada de la profesional» y que, en una ocasión, le dijo que «se callara la boca antes de que se enfadara» después de que Shemar le preguntara por algo que no entendía.
Por si esto fuera poco, el jugador tachó a Catalina de racista, ya que una vez le respondió que le estaba hablando como «un matón de las calles de los Estados Unidos». Wilson finalizó el comunicado afirmando que dentro de la directiva se sabía del comportamiento de Catalina y nunca se hizo nada. También comenta que le deben la última parte de su salario, el cual no le pagan porque son «mala gente» y la organización era «tóxica y poco profesional».
A estas horas del domingo, ni el Real Valladolid Baloncesto ni Pepe Catalina han respondido a las acusaciones, las cuales pueden irse multiplicando con el paso de las horas y dejar aún más señalado tanto al club como al ya exdirector deportivo.
