Sin apenas respiro tras la derrota ante el Insolac Caja 87, el UEMC Baloncesto Valladolid afronta este miércoles (20:45 h) otro reto mayúsculo: visitar al líder, el Coto Córdoba CB. David Barrio explicó que el equipo llega condicionado por el calendario: «Es una semana muy complicada por el tema de los descansos, por el tema del viaje, pero el equipo con muchas ganas». El técnico subrayó la reacción inmediata de los jugadores: «La actitud del lunes, como siempre, es irreprochable», aunque reconoció que siguen «un poquito dolidos por el hecho de perder en casa».
El exigente ritmo de competición les obliga a pasar página sin margen: «Lo bueno de este carrusel de partidos es que no da tiempo para pensar, no da tiempo para lamerse las heridas. Directamente nos hemos centrado en Córdoba porque no hay tiempo material para otra cosa».
Barrio confirmó que el equipo viajará sin Pau Carreño ni Fares. Sobre el primero, señaló que siguen pendientes de pruebas: «Esperamos que no sea nada grave», mientras que sobre el pívot reconoció que está «en la parte final, esperemos que muy final, de su recuperación». Aun así, fue claro: «Sabemos lo que tenemos y en ningún momento puede ser una excusa».
El técnico destacó el nivel del rival, que llega tras perder su primer partido del curso: «Córdoba es uno de los rosters más potentes de la competición. Hasta el momento estaban siendo absolutamente intratables». Para Barrio, enfrentarse a ellos es una prueba necesaria: «Si queremos estar luchando por las primeras posiciones, tenemos que intentar ganar a este tipo de equipos».
Sobre las claves, repitió la importancia del ritmo: «Tenemos que acelerar el partido y jugar en transición». Pero para hacerlo, deberán corregir dos aspectos en los que han sufrido: «Somos uno de los equipos con más pérdidas por partido y lo tenemos que corregir de forma urgente», además de asegurar el rebote, donde la baja de Fares pesa: «Por momentos sufrimos más de lo que nos gustaría».






